El ajo es una hortaliza cuyo bulbo se emplea comúnmente en la cocina mediterránea. Tiene un sabor fuerte (especialmente si lo comemos crudo) y ligeramente picante. La asociación del ajo al mal aliento ha provocado que muchas personas dejen de consumirlo, siendo este un alimentos con muchas propiedades beneficiosas para la salud: estimula las mucosas gastrointestinales, es diurético, es expectorante, desinfectante, descongestionante e hipotensor. Por todo ello, aquí les dejo unos truquillos para evitar el mal aliento después de comer ajo:
- Lavarse muy bien los dientes y la lengua es básico.
- Tomar zumo de limón, es bastante agrio y pero es muy efectivo para eliminar el olor a ajo.
- Si todavía notas olor a ajo en tu aliento, puedes enjuagarte la boca con una cucharadita de bicarbonato de sodio
- Si después de los consejos anteriores continúa, puedes probar masticando una ramita de perejil o comiendo algo dulce.
Y es que...¡Solo quien ha comido ajo puede darnos una palabra de aliento!
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